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Arquitectos: Estudio Herreros
- Área: 900 m²
- Año: 2014
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Fotografías:Adrià Goulà
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Un antiguo almacén ocupa el corazón de una manzana del ensanche al que se accede por un túnel que atraviesa las crujías residenciales. Allí se despliega un programa formado por dependencias para el almacenaje y manejo de obras, áreas administrativas y de reunión, espacios para la experimentación y proyectos específicos; y una gran sala central que es el centro del programa.
La arquitectura se acoge a lo que le ofrecen unos pocos materiales –estructuras vistas de hormigón, suelos industriales continuos, paredes blancas levitando sobre zócalos rehundidos, algunos muebles- para construir los ingredientes elementales de un espacio expositivo –suelos, paredes y techos- en el que se otorga a las obras de arte la responsabilidad de cualificarlo.
Tanto en su versión artificial como en la natural, la luz construye el espacio, tanto como recurso riguroso adaptado a cada exposición, como argumento escenográfico responsable de la personalidad específica del proyecto.
La reinterpretación del sistema original de lucernarios genera una serie de dispositivos captadores de luz a modo de periscopios a través de los cuales redescubrir el paisaje del ensanche en el que se incrusta la galería. Sus volúmenes general en la cubierta de la nave un nuevo paisaje industrial regalado a la ciudad que enhebra el pasado, el presente y el futuro de un lugar sorprendente.